LO BUENO SUPERA TODO
Federico Valverde, con toda la pinta de crack.
Jorge Crosa: Columnista
Cosas de uruguayos, al fin y al cabo.
Imagínese a Pajarito Valverde siendo titular en el Real Madrid, nada menos, el de Rial, Santamaría, uruguayos claro, Gento, Di Stéfano, Puskas, de los años 1953, 54, 55 …
Yo estuve con ellos,en Madrid, cuando el querido “Pichón” Núñez nos presentó en el estadio de Chamartín, hace muchos años a Di Stéfano, un personaje especial, Santamaría, nada menos y Rial, el hombre de Pergamino, delantero neto del tricolor, por los años 1952 en adelante.
Tiempos, naturalmente, que no ví, pero que fueron historia viva tricolor.
Y ahora, como si fuera, así nomás, nos encontramos con uruguayos que juegan por todo el mundo y reciben el reconocimiento de la gente.
No cualquiera jugaba en aquel momento en el Real, de hecho el Pichón jugó en Valencia, Mallorca y Levante.
Y ahora, hasta parece fácil destacar a Suárez en el Barcelona, Cavani en el Paris Saint Germain, Godín, Atlético Madrid, Giménez igual, Coates ( Sporting Lisboa) Pereira,en el Porto,Cáceres en la Lazio …
Maximiliano Pereira, en el Porto, Muslera en el Galatasaray, Lucas Torreira en el Arsenal … y así podemos seguir en esta larga lista de cracks uruguayos en el exterior.
Antes era sorpresa, hoy es el común denominador.
Sin embargo … hay contras. Siempre los hoy, siempre los habrá.
El hombre mediocre, lo cito de nuevo al brillante intelectual argentino, José Ingenieros, ve el fondo, no el frente, hurga en lo más triste, en el error, no en el acierto, en la tristeza, no en la alegría.
Y deberíamos estar orgullosos de estos jugadores celestes que nos representaron en Rusia.
¿Por qué escribo ésto?
Porque me aburrí de las grabaciones, de los juzgados, de ¿viste lo que le dijo …?
Plutarco escribió hace siglos que “los animales de una misma especie difieren menos entre sí, que unos hombres de otros …”
Ya está. Eso no es deporte. Arranca en un escritorio y el pretexto es el fútbol.
Ya no nos interesa.
Queremos destacar lo bueno del quinto puesto, histórico, por lo menos para mí, en un fútbol moderno, dinámico, veloz, distinto al de aquellas épocas de Rial, Di Stéfano, Santamaría y el Pichón Núñez.
Hay cierta probreza de espíritu o no nos hemos dado cuenta del paso gigantesco, de la gestión brillante del cuerpo técnico de la selección uruguaya, con Tabárez y su grupo.
Parece que no.
Que tenemos que encontrarle el defecto a todo y machacar sobre él.
Nunca Uruguay tuvo tantos jugadores destacados y brillantes en el exterior. Nunca se habló tan bien de Uruguay y sin embargo acá nos preocupamos por el lenguaje inclusivo de los escritorios.
Inexplicable. Que lo arreglen de una vez, porque para eso está la Justicia, pero no empañen el fútbol uruguayo con grabaciones, papeles, arreglos y demás temas en el que la pelota no tiene nada que ver.
Hay cierta hora que hay que descansar …
Aflojemos los músculos, miremos fútbol, disfrutemos o no, cada cual a su manera, pero que los papeles y documentos, aunque esté muy bien investigar las malas maniobras, no tapen el césped del escenario, un buen gol, un lindo tiro libre, un penal bien atajado o una victoria de tu club querido.
Uruguay futbolístico es mucho más que las malas acciones en los escritorios, como fue dicho.
Que este episodio quede como un lejano episodio, que se averigüe todo, que se aclare y disfrutemos de nuestras actuaciones internacionales, que tanto dan que hablar al mundo entero … menos a nosotros, que, hacemos de la negatividad un culto.
Y mejoremos el producto local, que,naturlamente, se puede.
¿Qué le parece?
Puede imprimirlo,claro.
