Luis Gorocito, los tres goles de la fecha y el fútbol del Palacio en La Escuelita
Luis Antonio Gorocito, el jugador de la etapa.
¿De dónde salen?, se preguntan en el Mundo y no es una exageración, ¿cómo se forman los futbolistas uruguayos para siendo tan poquitos destacar tanto? Quizás Luis Antonio Gorocito, elegido el mejor jugador de la fecha, con tres de los cinco goles de Racing, pueda dar una respuesta sin pretenderlo.
Luis Antonio Gorocito, el jugador de la etapa.
Tiene veinte años. Es de La Aguada, de esta ciudad de Montevideo que tiene una característica en común a todas las ciudades del Uruguay: a falta de otros más adecuados que resultan insuficientes para todos los que juegan, se utilizan para jugar al fútbol espacios inverosímiles.
Alguna vez, recorriendo la ciudad con amigos extranjeros, les ha llamado la atención ver botijas jugando partidos de fútbol, por ejemplo en un reducido espacio triangular donde un árbol y una piedra servían para marcar uno de los arcos, al lado del tupido tránsito de acaso el mayor centro nerviosos de la capital, la circunvalación del Palacio Legislativo. Ahí jugaba Luis Antonio Gorocito de chico.
Salía de la escuela 133 de la calle Piedra Alta y trepaba el repecho de la calle Magallanes donde está esa placita. Ahí su padre fue su primer entrenador y de ahí un amigo de su padre lo llevó al Cohani Baby Fútbol, de la Liga Paso Molino, allá por las viviendas de Millán y Lecocq, ya en pleno territorio de La Escuelita racinguista.
Tres años en el Cohami y a la AUFI, Racing y Liverpool. Medio año de séptima en Liverpool y todas las formativas en Racing.
Lo ascendió a primera Osvaldo Streccia, que fue técnico en cuarta y tercera de buena parte de la botijada de este grupo que hoy dirige Rosario Martínez. Cuando Streccia tomó el Primero subió a Gorocito a hacer la pretemporada y a practicar en Primera división, con dieciocho años. Al año siguiente, Gorocito debutó en el Campeonato Uruguayo, con Jorge Giordano como entrenador, tres minutos ante River y al partido siguiente, en cancha de Racing, el viejo Parque Roberto, veinte minutos ante Cerro y su primer gol en Primera.
“En inferiores hice varias veces tres goles en un partido, pero en Primera es la primera vez que hago más de un gol en un partido”, dice Gorocito, así con c, a diferencia del famoso Néstor “Pipo” Gorosito, a quien de niño Luis vio jugar por televisión, porque su padre lo admiraba. A los seis años, Luis jugaba de 10 igual que el Pipo, pero en seguida se pasó de delantero por lo mucho que le gustaba hacer goles. Todas las formativas en La Escuelita las hizo de 9.
“De todos los entrenadores que tuve aprendí formas de definir y a valorar al equipo, con un grupo muy unido que te apoya y te da para adelante siempre. Ayer fue la tarde soñada, la que uno siempre soñó. No se hubiese dado sin el apoyo de todo el grupo, siempre destaco al equipo, me recordó todos los momentos que pasé desde chico, a mi familia y a los directores técnicos que me enseñaron cosas y también a los compañeros que tuve”.
Streccia, Giordano, Piazza, Rosario Martínez… y de los 9 que han pasado por el Primero de Racing, de las prácticas día a día, tuvo un espejo en Quiñones.
Luis Antonio Gorocito
“A Líber Quiñones lo veía cómo definía y creo que he aprendido mucho de él”.
Hizo liceo en La Aguada, el liceo 17 en ciclo básico y después el Miranda.
“El sueño es ir paso a paso. Fue algo muy lindo marcar tres goles, pero uno ya piensa en lo más cercano, que es el siguiente partido, ante Fénix en Capurro. Si bien uno todas estas cosas las sueña desde chico, convertir goles, llegar a la selección, vestir la camiseta más linda que es la celeste, pero hoy por hoy uno sueña sacar a Racing lo más adelante posible y poder hacer un buen torneo que es lo más cercano que tenemos. Queremos pelear lo más alto posible y -por qué no- soñar en grande con salir campeón”.
En el momento del festejo por el 5 a 0 y por sus tres goles, recordó: “la lucha que vivimos, las pretemporadas y el campeonato pasado cuando peleamos el descenso, ahora que estamos en lo lindo de un pleno campeonato nuevo”.
¿De dónde salió? Está en su historia. ¿Cómo se formó? Se deduce de sus palabras.
