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El Gatopardo




"Hoy se cumplen 10 años que llegamos al Complejo", dijo Oscar Tabárez. (21 de marzo de 2016)


13 agosto, 2016
Columnistas

Estamos ante el inicio de una nueva temporada de fútbol.

Es particular ya que dura unos 3 meses y medio en la primera división y menos tiempo en la antigua B.

En mi época de jugador nos quejábamos porque nos contrataban  por ejemplo en la B, unos 5 o 6 meses y luego estábamos parados el resto del año, pero en la A, nos contrataban  todo el año.

Los entrenadores también estaban ligados  a esos avatares con el agravante de que cualquier traspié del equipo, se quedaban sin trabajo “al toque”, y ni que hablar de cobrar (no existía el Estatuto del entrenador y había que “ver donde cayó el avión para hacer efectivo los haberes”).

A la inversa de lo que ocurre en los clubes con la continuidad  de los entrenadores;  dentro de la selección  ocurre, hoy,  hay una estabilidad.

Cosa que no existía; daré solo 2 ejemplos; Rafael Milans (en 1965)  clasificó a nuestra selección al mundial de Londres-Inglaterra, pero al evento (1966)  fue como entrenador Ondino Viera y para Alemania Occidental (1974) nos clasificó Hugo Bagnulo (en 1973) de entrenador y al mundial fue, Roberto Porta.

"Hoy se cumplen 10 años que llegamos al Complejo", dijo Oscar Tabárez. (21 de marzo de 2016)

“Hoy se cumplen 10 años que llegamos al Complejo”, dijo Oscar Tabárez. (21 de marzo de 2016)

La estabilidad siempre para el conductor del grupo de futbolistas lo hace desarrollar toda su capacidad y generalmente ese desarrollo va de la mano con que tanto lo deportivo como la formación de futbolistas  roce más la efectividad, que en periodos cortos y  algunos turbulentos.

Desde el 2006 donde asume Oscar Washington Tabárez al frente de la selección mayor de Uruguay, hasta este 2016 (10 años) han pasado por el Ejecutivo de la A.U.F, 5 cuerpo de Neutrales (los encabezados por el Sr. Eugenio Figueredo, Dr. José Luis Corbo, Sr. Washington Rivero, Dr. Sebastián  Bauza y  el actual, Esc. Wilmar Valdez).

Ahora  repasaremos para completar un comparativo de  las  2  partes (A.U.F-Clubes), tomando como referencia  a nuestros 2 equipos grandes y representativos  con más glorias en nuestro país.

Martín Lasarte, uno de los tres DT tricolores repetidos desde el 2006 a la fecha.

Martín Lasarte, uno de los tres DT tricolores repetidos desde el 2006 a la fecha.

A partir del 2006 el club  Nacional de Futbol  tuvo como entrenadores principales a Martín Lasarte, Daniel Carreño, Gerardo Pelusso, Luis González, Eduardo Acevedo, repite Luis González, Juan R. Carrasco, Marcelo Gallardo, Gustavo Díaz, Juan Carlos Blanco, Adolfo Arruabarrena, repite Gerardo Pelusso, Álvaro Gutiérrez, Gustavo Munúa y repite nuevamente Martín Lasarte.

Sin contar las repeticiones (3);  son 12 entrenadores en 10 años, más de uno por año, pero son 15 conducciones.

En el otro grande, en el Club Atlético Peñarol, ocuparon el banco de entrenador desde esa fecha; Luis Garisto, Mario Saralegui, Gregorio Pérez, Gustavo Matosas,  repite Mario Saralegui, Julio Ribas, Víctor Púa, Diego Aguirre, Manuel Keosseian, Edison Machin (int.), repite Diego Aguirre, repite Gregorio Pérez, Jorge da Silva, Diego Alonso, Jorge Goncalvez, Jorge Fossati, Paolo Montero (int.), Pablo Bengoechea y repite el actual  Jorge da Silva.

Jorge Da Silva, uno de los cuatro DT carboneros repetidos desde el 2006 a la fecha.

Jorge Da Silva, uno de los cuatro DT carboneros repetidos desde el 2006 a la fecha.

Sin contar las repeticiones (4) y los interinatos (2) fueron 13 entrenadores en una década, es decir también más de uno por año, con 19 conducciones.

Mientras que en el comparativo surge que en la A.U.F permanecía el entrenador; pero cambiaban los dirigentes; en los clubes los que cambian son los entrenadores, y los dirigentes cambian, en sus clubes, generalmente en los periodos normales de elecciones.

Es decir que resumiendo lo escrito y cuando hablamos que la selección es una cosa y el futbol interno es otra; ese movimiento interno  casi permanente contrasta nítidamente  en 10 años  con la estabilidad  del entrenador de la selección uruguaya de futbol y donde  en ese mismo periodo  se concurrió a 2 mundiales mayores seguidos (2010 y 2014) se obtuvo un 4° puesto mundial (2010) , 1 Copa América (2011) , 1 campeonato Panamericano (2015) que tiene la importancia de que son las 3 Américas, sin embargo se le resta trascendencia; más la efectividad de las selecciones juveniles (incluidas dentro de ese Proceso de selecciones) en los torneos internacionales, con buenas participaciones.

En los clubes el desafío permanente no logrado es lo internacional, y en lo interno, a los grandes se les “colaron” en los títulos locales los equipos en desarrollo, aprovechando los cambios de conductores técnicos, en ese mismo periodo de 2006-2016:

Danubio campeón uruguayo                     2006/2007

Danubio campeón uruguayo                     2013/2014

Defensor Sporting campeón uruguayo  2007/2008

En los Torneos cortos fue así:

Danubio campeón de Apertura                     2006

Danubio campeón de Clausura                      2007

Defensor Sporting campeón de Apertura  2007

Defensor Sporting campeón Clausura         2009

Defensor Sporting campeón Apertura        2010

Defensor Sporting campeón Clausura         2011

Defensor Sporting campeón Clausura         2013

Plaza Colonia campeón Clausura                   2016

Mientras que la selección goza de estabilidad, los grandes buscan una estabilidad de títulos, sobre todo internacionales.

Arranca el campeonato uruguayo, y en el rubro entrenadores,  con Julio Avelino Comesaña (Racing; el club de sus inicios de futbolista) como emblema de experiencia hasta llegar al  debut como el de Leonel Rocco (Plaza Colonia)  y llegando al más joven; el argentino Germán Corengia  (Rampla Juniors) con sus 35 años.

Porque; “cambiar algo para que nada cambie”, tiene su origen en la paradoja expuesta en la novela El gatopardo, del escritor italiano Giuseppe Tomasi di Lampedusa (1896-1957) y llevada al cine por el genial director italiano Lucchino Visconti interpretada por otro genio, Burt Lancaster.

Nuestro deseo es que al ser tan corto el torneo, tenga la estabilidad en los conductores y se tenga la estabilidad que todo equipo debería tener para recoger sus frutos, ya que todos los clubes lo merecen por el esfuerzo que realizan para mantener los mismos.