Schiaffino eterno
Se cumplen 100 años del nacimiento del inolvidable Juan Alberto Schiaffino, leyenda que marcó la historia del fútbol uruguayo y del fútbol mundial con su gol convertido en el "Maracanazo" de 1950.
El histórico gol de Schiaffino ante Brasil, que significó el empate parcial de Uruguay ante Brasil, en el "Maracanazo" del Mundial de 1950.
Un día como hoy, 28 de julio, pero de 1925, nacía Juan Alberto Schiaffino. Un nombre que, años más tarde, quedaría eternizado en las ricas páginas de la historia del fútbol uruguayo, así como del fútbol mundial, que él mismo escribió.
No solo reconocido y recordado por su participación clave en la gesta del “Maracanazo” de 1950, junto con el inolvidable gol que significó el empate parcial en la final ante Brasil, sino también por su talento inigualable dentro del campo de juego, Schiaffino es considerado uno de los mejores jugadores de la historia. De hecho, la IFFHS (Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol) lo designa como el mejor jugador uruguayo de la historia.
Además de ser campeón del mundo con Uruguay, “Pepe” Schiaffino, quien se desempeñaba como volante ofensivo, también fue tres veces Campeón Uruguayo con Peñarol —1949, 1951 y 1953— y supo brillar en Europa. Concretamente, en Italia, donde fue multicampeón y se convirtió en ídolo del Milan, así como de la Roma.
En definitiva, se trata de una leyenda que enorgullece y pone en lo más alto al fútbol de nuestro país. Y el ex presidente de la República, periodista, escritor, crítico de arte y presidente honorario de Peñarol, Julio María Sanguinetti, se encargó de dejarlo claro en las palabras que impregnó en el libro “Peñarol y su gente”:
“El fútbol de Schiaffino era un fútbol moderno, con la búsqueda del espacio total y el juego en largo, practicado por un deportista que tenía todas las capacidades: marcaba como nadie sin dar un puntapié, era veloz, shoteaba a la perfección en cualquier circunstancia, pero su gran cualidad era que todo el mundo terminaba jugando a lo que él quería, aun sin ordenarlo. Y hay ahí una característica muy importante, histórica también, que es que a Schiaffino no se lo entendía. Para mí, es uno de los cracks más completos a nivel mundial de cualquier época. Sin embargo, no fue un ídolo, porque la gente apreciaba mucho más la fuerza de Hohberg, las habilidades de Míguez o el liderazgo de Varela, ni un caudillo, por su propia personalidad de individuo retraído, muy lejano al estereotipo del tipo alegre y bohemio de esa era. Cuando empezó a ser un hito en la historia del fútbol italiano, la cosa cambió. Pero un tópico entre los muchachos de la época era su supuesta frialdad”, expresó Sanguinetti.
Por otra parte, en una entrevista exclusiva que el escritor Mauricio Rosencof mantuvo con Tenfield.com en 2020, el autor de “Las cartas que no llegaron” afirmó que “Maracaná es un ejemplo y un pedazo de nuestra historia. Somos nuestra memoria, y sin entender el pasado no somos nada”, y sobre el eterno Schiaffino, agregó: “¿Sabés lo que era verlo jugar a Schiaffino? Era un lujo. Su hermano Raúl fue un crack y conformó la famosa delantera de bajitos aurinegros, integrada por Ortiz, Gelpi, Schiaffino, Chirimini y Vidal. Y a Pepe, aunque te parezca mentira, había gente que lo criticaba por no meter la pata. Andá a decir eso de Schiaffino ahora: ¡te circuncidan la lengua!”.
Schiaffino, leyenda mundial.
Today, we remember a true Rossonero legend: Juan Alberto Schiaffino 💫 pic.twitter.com/1RpRJId8SC
— AC Milan (@acmilan) July 28, 2025
